Cómo las palmas de tu mano.
Tus abrazos son como los primeros rayitos de sol del alba.
Siempre incondicional y altruista por la familia,
Tus consejos son como susurros directos del corazón.
Emotiva y paciente, creyente y devota
Te amo mamá y las palabras me quedan cortas, para decirte lo mucho que te admiro,
Porque siempre has sacrificado y puesto las prioridades sobre las tuyas, me has enseñado
Que las tormentas solo son de paso, hemos reído, hemos cantado y también hemos llorado.
Como quisiera poder recordar la primera vez que te ví mamá cuando me cargaste en tus brazos, cuando te dije mami o mamá por primera vez y hasta hoy te agradezco porque me sigues educando y acompañando en cada paso.
Fuiste paciente con mi mal genio y algunas malas decisiones y aún así tú amor siempre ha estado conmigo.
Y aún sigo aprendiendo como ser una mejor hija, una mejor hermana y una mejor persona ante mis dudas y mis ansiedades, el poder tomarme el tiempo de estar sola y interiorizarme y poder convertirme en una mejor mujer.
Siempre te tengo presente mamá, en las rosas, en las mariposas y los colibrís, en el mar que se que tanto te gusta.
Y me siento afortunada que aún podamos compartir los chambrecitos de esta vida loca, me siento agradecida de poder abrazarte y de vez en cuando ponernos a corear alguna canción como un karaoke improvisado, hacerte reír con alguna ocurrencia del momento. Te amo mamá, gracias por enseñarme a ser amable, a ser paciente, a ser incondicional y tener empatía con los demás.
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